Soy Pilar Bermejo Arce, creativa interdisciplinar con más de 10 años de experiencia profesional en el amplio sector del diseño.
Me considero perfeccionista, autoexigente, pragmática y al mismo tiempo sensible y con una gran inteligencia emocional.
Creo en el diseño como herramienta de comunicación, y considero que es un buen trabajo cuando cumple su objetivo.
Un poco de historia
A pesar de ser una estudiante de ciencias puras encaminada a Arquitectura, decidí estudiar Bellas Artes, y me enamoré de la carrera. Mi lado pragmático me condujo a especializarme en Nuevas Tecnologías de la imagen, y éstas también me sedujeron. Obtuve algún premio como artista y realicé alguna exposición pero finalmente siempre me he considerado profesionalmente activa como diseñadora gráfica interdisciplinar, es decir, juego estratégicamente con la comunicación desde todas sus disciplinas, combinándolas de forma coherente para un resultado eficiente: una adecuada imagen de marca, servicio o producto dirigido a su cliente potencial.
Un poco de mi currículum
En mi trayectoria profesional he trabajado en el mundo editorial diseñando y maquetando, como ilustradora y fotógrafa. He realizado vídeos corporativos o anuncios publicitarios, y por su puesto he trabajado en el mundo del marketing y la publicidad realizando estrategias y campañas tanto en su disciplina convencional como en la digital.
Ver currículumUn poco de mi visión de esta profesión
Un buen diseño no sólo debe ser equilibrado (incluso a veces no tiene por qué serlo), lo que debe buscar es comunicar en apenas unos segundos un mensaje concreto. Normalmente lo más difícil es saber qué mensaje se debe de comunicar, y después plasmarlo visualmente, convencionalmente con un texto, aunque tampoco es imprescindible. Finalmente diseñar algo es pura estrategia de comunicación. Diseñar no es hacer las cosas bonitas, es enviar mensajes al receptor casi de forma subliminal: un diseño no tiene ni debe ser igual para una marca dirigida a un público de alto nivel adquisitivo, que para un publico más amplio de clase media, a pesar de que ambos productos sean muy similares. Es decir, la experiencia de usuario no sólo se lleva a una web, una aplicación o un producto digital, se lleva a cualquier “cosa” que tenga que pensarse como un diseño. Y si el diseño es bueno, comunicará de forma eficiente, si no lo es, a lo mejor simplemente es chulo.